Los profesores de Técnicas agropecuarias, Eduardo y Sebastián, les enseñaron a los alumnos de 6° agrupamiento como conservar alimentos de forma sana, casera y sustentable. Para esto, realizaron juntos, el paso a paso de un deshidratador solar de frutas y verduras. Armaron la estructura de madera, luego la pintaron con un protector de madera, le colocaron los nylon y ya está casi listo para usar.
En el aula antes de comenzar con el armado del deshidratador les explicaron que, deshidratar los alimentos, es decir, secarlos mediante el sol y el viento para evitar su deterioro, es un sistema de conservación que se remonta al Neolítico y los expertos afirman que conserva intacta las enzimas, vitaminas y minerales.
A diferencia de las conservas o la congelación que somete el alimento a temperaturas extremas (calor o frío), el proceso de deshidratado es suave y permite preservar mejor todas las propiedades nutricionales durante largo tiempo.
Deshidratar consiste en extraer el agua de los alimentos, lo que evita la proliferación de microorganismos y la putrefacción porque las bacterias y microorganismos del interior de los alimentos y procedentes del aire necesitan agua en el alimento para crecer. El secado les impide sobrevivir en él. Además, también crea una capa exterior dura que ayuda a evitar que los microorganismos penetren en los alimentos.
Y otras ventajas de este sistema son: la reducción del peso de los alimentos que permite que se guarden, transporten y manipulen de forma fácil. Y al desaparecer 7/8 partes del agua, el sabor es más concentrado e intenso.
Las deshidratadoras sirven para secar alimentos y otros productos. Son realmente versátiles. Además de las frutas y verduras, se pueden secar los siguientes alimentos:
•Sopas instantáneas: se deshidratan verduras variadas y ya las tenemos como las que venden para sopas instantáneas
•Rollitos de frutas: se deshidrata fruta batida y se convierte en una lámina enrollable. Una buena idea como tentempié sano y como “golosina natural” para los niños”. También se pueden hacer con yogur, batidos y otras mezclas
•Comida de bebés: se puede deshidratar purés para después triturarlo y hacerlo polvo.
•Barritas de cereales: se pueden hacer barritas de cereales con copos de avena, trozos de fruta deshidratada, yogurt, miel, coco y frutos secos
•Semillas como pipas de calabaza y de girasol
•Carne desecada: se pueden deshidratar carnes maceradas en salsas, en ajo y perejil.
•Sal de hierbas
•Devolver la textura crujiente a galletas, pan, tortas de arroz, crakers, etc.